Disfrutamos de propuestas de juego llenas de objetos de carnaval con las que aprendemos a disfrazarnos, es muy divertido ponerse pelucas, gafas chulas y sombreros divertidos.
Con el cuento de César el bombero aprendemos nuevo vocabulario y jugamos con mangueras. Escuchamos diferentes sonidos y canciones relacionados con esta profesión tan apasionante, ¡nos encanta!
Salimos nuestro patio delantero equipados con nuestro traje de bomberos dispuestos a ayudar a un gatito a bajar del árbol y a apagar el gran fuego que había en la fachada. Tras un duro trabajo de extinción disfrutamos de la fiesta y del confeti que salía de las mangueras de nuestras profes para luego regresar a la clase y seguir jugando y bailando con serpentinas y cajas.
¡Sin duda vivimos experiencias inolvidables llenas de emoción!